“Un ritual es la representación de un mito, es actuarlo.
Al participar en el rito estás participando en el mito.”
Joseph Cambell
A lo largo de mi vida he realizado infinidad de rituales. He hablado, comentado, estudiado y realizado tantos como deseos he tenido. El ritual nos ayuda a conectar con lo Superior, con Dios, el Universo Consciente o la Fuente Original. Nos hace formar parte del mito de lo divino. Es en esencia algo inherente al ser humano, los rituales aparecen en todas las culturas y a lo largo de toda la existencia de la Humanidad.
El ritual es un conjunto de actos, palabras y objetos que regulan una ceremonia de manera consciente. Los objetos rituales pueden parecerse a los del día a día pero no lo son. Se les confiere un poder místico que les acerca a la divinidad y por esa razón no debe confundirse nunca un ritual con un hábito. Aunque en muchos sentidos los rituales pueden parecerse en lo formal y en su repetición, la diferencia fundamental es la intención puesta en un ritual.
CARACTERÍSTICAS DE UN BUEN RITUAL
En el mundo de lo mágico, pero también en el mundo de lo religioso, para hacer un buen ritual que nos conecte verdaderamente con la Fuente, es imprescindible escoger un lugar de recogimiento un lugar que os permita asilarnos de lo mundano. No tiene porqué ser solo en nuestra casa, también puede ser en un jardín, en el bosque o junto al mar.
Los rituales de magia blanca son siempre basados en el Amor, la fuerza que nos conecta con la Fuente, o con el Ser.
Por supuesto otro componente imprescindible es la Fe. Hay que creer, debemos tener la certeza que nuestro ritual será del agrado de a quien va dirigido; que nuestro Amor y nuestra Fe nos van a conectar con la Fuente para conseguir aquello que deseamos o necesitamos.
Desde luego que lo pasos a seguir en nuestro ritual son de máxima importancia, pero siempre sean secundarios con respeto a la Fe y el Amor. Esto lo remarco porque hay veces que no tenemos todos los ingredientes en un ritual y eso puede desanimarnos, sin embargo no siempre es una cuestión de ingredientes si no de intención.
A TENER EN CUENTA PARA UN BUEN RITUAL