La vida siempre nos sorprende, de esto no hay duda alguna. Algunas veces, la mayoría, nos sorprende con buenos momentos: nos ofrece aquello que tanto nos merecemos, nos hace sentir vivos, nos hace sentirnos llenos de energía y alegría. Sin embargo, también es cierto que, en determinadas ocasiones, estas sorpresas pueden ser menos agradables. Y, normalmente, estas situaciones se nos presentan para que aprendamos. Debemos aprender cuáles son las lecciones que la vida nos pone por delante, crecer personalmente y cerrar bucles de los que parece que nunca podamos salir. Y, para conseguir este cambio en nuestras dinámicas, lo mejor es tener a nuestros guías espirituales cerca. Os lo contamos todo sobre ellos en este post.
Contents
Son muchas las personas que no saben qué son los espíritus guía o los guías espirituales. En este caso, hacemos referencia a estas entidades sin cuerpo que se encuentran en otro plano y que están a nuestro lado en todo momento para ayudarnos a seguir nuestro camino por la vida. Nos apoyan, nos brindan consejo, nos aconsejan y nos permiten superar las pruebas que la vida nos pone por delante.
Debemos recordar que todos tenemos una misión en esta vida, unas pruebas a superar y unos cambios a realizar. Para conseguirlo, lo mejor es contar con la ayuda de estos guías en todo momento. Sin embargo, sabemos que no siempre es fácil conectar con ellos y es que hay una gran cantidad de “distracciones” en nuestro día a día que no nos permiten disfrutar del tiempo y la serenidad necesaria para conseguir este contacto con ellos.
Como hemos dicho, conectar con nuestros espíritus guía es esencial si queremos acabar con estas situaciones bucle, estas lecciones que la vida nos va poniendo por delante, las cuales debemos aprender a resolver de manera diferente para cerrar círculos. No hay manera de crecer, de evolucionar, si no somos capaces de darnos cuenta de ello. Y, sin ellos, será mucho más difícil, por no decir casi imposible.
Hay, para ello, varias maneras en la que podemos entrenar nuestras habilidades para poder establecer contacto con nuestros guías:
Aprender a relajarnos y a meditar es la base fundamental que debemos entrenar para poder contactar con nuestros espíritus guía. Tanto es así que si no somos capaces de apagar este piloto automático que llevamos dentro, nunca seremos capaces de sentir esta voz interior que nos indica el camino a seguir.
Sabemos que, en la actualidad, no resulta fácil desconectar el piloto automático. Ni mucho menos. Pero, es algo que debemos hacer y no solo para poder establecer esta conexión de la que estamos hablando. Es importante para nuestra salud que nos aprendamos a querer, a cuidar. Y, la meditación es lo mejor para ello.
Para empezar a meditar, hay que entrenar y tener mucha paciencia. No es una habilidad que vayamos a desarrollar de un día a otro, sino que es un trabajo constante. Pequeños esfuerzos diarios que nos llevarán a conseguir los resultados que buscamos. Si no estamos acostumbrados a ello, hay ciertos aspectos a tener en cuenta si queremos implantar esta rutina.
Lo primero, y fundamental, es iniciar la meditación con algún tipo de aplicación que nos permita dirigir nuestra atención a un objetivo. De no ser así, al encontrarnos solos con nosotros mismos, nuestra mente empezará a divagar sin más y no tendremos mucho éxito.
Sin embargo, cuando aprendemos con algo guiado, sea una app o un profesional de la meditación, se dan pequeños pasos a diarios que nos dan muchos mejores resultados a corto plazo. Y, cuando seamos capaces de mantener este período de meditación a diario, pronto podremos dejar de usar las ayudas, escucharnos a nosotros mismos y, por ende, llegar a esta conexión con nuestros espíritus guía.
También os hemos hablado de la relajación. Pese a que puede sonar igual que la meditación, lo cierto es que no lo es. Cuando hablamos de relajación, nos referimos a estos minutos antes de dormirnos de los que disfrutamos cada día. Si somos capaces de relajarnos, también podremos conectar con nuestros espíritus guía cada vez que nos sea necesario.
La intuición, en parte, es esta vocecita que nos viene de parte de nuestros guías. Saber escucharla es algo que debemos entrenar, pues el piloto automático del que os hemos hablado nos aleja de ella. Así pues, debemos empezar a sentarnos con nosotros mismos y hacernos estas preguntas que queramos solucionar. Si nos concentramos lo suficiente, pronto veremos que las respuestas empiezan a llegar.
Otra manera en la que podemos conectar con nuestros guías espirituales es mediante sistemas de adivinación. Y el más simple a usar es el Tarot. Si no somos usuarios de estas cartas, lo principal será aprender a hacerlo. Y, para ello, no hay nada mejor que contar con la ayuda de un vidente profesional. Ellos conocen bien las cartas, el origen del Tarot y sus correspondencias, las tiradas y, sobre todo, cómo usarlo como herramienta espiritual. Así pues, os animamos a contactar con un tarotista profesional para iniciar esta nueva práctica en vuestra vida.
Una vez conozcáis el Tarot lo suficiente como para poder interpretar los Arcanos y seleccionar las tiradas más adecuadas en función de la información que necesitéis, lo podréis usar para consultar a vuestros guías espirituales. Para ello, algo que ya también aprenderéis, tan solo será necesario hacer una consulta al Tarot, pero “indicando” que se destina a los guías espirituales en vez de al oráculo. De este modo, serán ellos con los que podremos contactar y, de este modo, solventar todas las dudas que nos puedan surgir ante determinadas situaciones.
Como veis, contar con el consejo de nuestros guías espirituales es fundamental para ir aprendiendo lecciones, cerrar círculos y crecer como personas. Para conseguirlo, será suficiente con que encontremos la manera de centrarnos en nosotros, de permanecer en silencio y crear eta conexión que necesitamos en un momento dado.